No nos cansamos de recordar la importancia que tiene comenzar el aprendizaje de idiomas a una edad temprana debido a las capacidades innatas de los más pequeños de aprender cosas nuevas, absorber sonidos diferentes, frases, entonación, pronunciación, con bastante menos esfuerzo del que tiene que hacerlo un adulto.
Numerosos estudios demuestran que el momento ideal para aprender otro idioma y adquirirlo de forma nativa se encuentra entre los 0 y los 7 años.
Esto significa, que siendo adultos, tendremos que esforzarnos un «poquito» más que un niño de 5 años, pero no significa en absoluto que sea imposible aprender un nuevo idioma y adquirir un alto nivel de destreza. De hecho, el cerebro de un adulto esta en realidad mucho «mejor equipado» para el aprendizaje de idiomas que el de un niño, en muchos aspectos.
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¿Cuáles son los beneficios de aprender inglés siendo adulto?
Las ventajas de aprender otro idioma son evidentes, a cualquier edad. A continuación mencionamos 3 de ellas cuando se aprende un idioma nuevo siendo adulto.
1. Vocabulario más amplio
Los adultos poseemos un rango más alto de vocabulario y una mayor comprensión de conceptos de los que puede tener un niño que tiene que esperar varios años antes de aprender algunas palabras, simplemente porque son demasiado pequeños para entender los conceptos, al igual que pasa cuando adquieren su lengua materna.
Esto proporciona a los adultos con la ventaja de contar con herramientas cerebrales avanzadas que les permiten comprender y hacer abstracciones gramaticales como conjugaciones verbales, palabras homófonas, géneros, etc.
Es por eso que los adultos pueden aprender vocabulario de niveles intermedios o avanzados desde el primer momento que empiezan a estudiar un nuevo idioma, pues ya tienen esos conceptos en la cabeza, mientras que los niños tienen que esperar a alcanzar la madurez mental necesaria para aprenderlos.
2. Más oportunidades de aprendizaje al alcance de la mano
Un adulto puede aprender un nuevo idioma de muchas formas diferentes.
Un niño normalmente va a aprender en una clase, o de la mano de otro adulto que le hable en ese idioma, pero no irá por sí mismo a buscar recursos para seguir avanzando.
Un adulto, al tener la motivación de aprender y todas sus capacidades desarrolladas, puede encontrar oportunidades para aprender no solo asistiendo a clase sino también a través de libros, revistas, películas en versión original, intercambios lingüísticos, viajes al extranjero, redes sociales especializadas, entre otras opciones.
3. El aprendizaje de idiomas retrasa el envejecimiento
Al igual que muchas otras partes de nuestro cuerpo, el cerebro necesita que se le ejercite para mantenerse sano y activo.
En concreto, las partes de nuestro cerebro que se utilizan activamente en el proceso del aprendizaje de una nueva lengua, aumentan de tamaño y se hacen más capaces y más adaptables. Esto se traduce en un fortalecimiento de las redes neuronales que aumentan la plasticidad del cerebro y por tanto ayudan a frenar el envejecimiento.
El ejercicio mental que requiere el aprendizaje de una nueva lengua, ha sido objeto de varios estudios científicos que han descubierto como ayuda a mejorar capacidades cognitivas como la memoria, lo que a su vez puede ayudar a prevenir o retrasar la aparición de enfermedades tales como el Alzheimer.
Por tanto, podemos concluir que los beneficios y ventajas de aprender un nuevo idioma como el inglés está presente en todas las etapas de la vida, y no solamente a una edad temprana, sino que en realidad, se incrementan conforme nuestros cerebros se van haciendo más desarrollados.
Se puede decir que en cuestión de aprendizaje de idiomas, ¡realmente nunca es demasiado tarde para empezar!
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